La Comisaría de la Policía Nacional de Maó vivió ayer una jornada especial por la emotiva despedida que brindaron los agentes de las diferentes unidades a Felipe Marzo. El veterano policía cumplió su última jornada de servicio, previo paso a la jubilación, tras una trayectoria de 44 años y tres meses en el cuerpo.
Marzo, que pertenecía al equipo de la Policía Judicial, cumplió sus dos primeros años en Barcelona para regresar a su Menorca natal en 1983, donde ha transcurrido toda su vida laboral.
Los compañeros y compañeras del policía se situaron ayer al mediodía, a lo largo del lateral de la Comisaría y la Dirección Insular del Estado, en la plaza Miranda, para darle un sentido abrazo y un merecido aplauso en el momento de su despedida.