El PSOE ha presentado alegaciones a los presupuestos del Consell de 2025, aprobados de forma inicial hace un mes en un pleno controvertido por la ausencia de dos consellers socialistas y la negativa del presidente Adolfo Vilafranca a aplazarlo. La intención del PSOE con esta alegación es forzar que las cuentas vuelvan a pasar por pleno y se visualice, de este modo, el verdadero equilibrio de fuerzas en la institución. Además, si Vox persiste en su voto negativo los presupuestos serán rechazados y tendrían que volver a tramitarse, o acudir a una nueva prórroga de los aprobados para 2023. Si no hay alegaciones, la aprobación definitiva es automática.
Desde las filas del PSOE entienden que están en su derecho de alegar puesto que cumplen con los requisitos de representar a una parte afectada, en este caso los ciudadanos que les votaron, y que sus argumentos están fundamentados. En concreto, la alegación socialista se basa en que la prórroga, por el momento, de las cuentas del Govern no garantiza la suficiencia de ingresos para ejecutar algunas de las partidas recogidas en los presupuestos del Consell. También se acogen a un defecto de forma, por la ausencia de los balances de los ejercicios precedentes que se exigen en estos casos.
La secretaría general del PSOE, Susana Mora, no esconde que se trata fundamentalmente de un movimiento de carácter político,«el objetivo es que se vuelvan a votar y que se haga con todos los consellers. Queremos enmendar un pleno que fue una perversión de la democracia».
Las alegaciones a los presupuestos del Consell tras su aprobación inicial no es algo frecuente.En su día presentó una alegación Cesgarden al no incluir las cuentas una partida para abonar la indemnización por la que en aquellos momentos estaba pugnando en los tribunales.
Cuando leo este tipo de noticias sobre las "preocupaciones" de la señora Mora y señor Robsy, me quedo boquiabierto. En vez de pedir perdón, disculpas por su comportamiento y callar. Y hacer un ejercicio autocorrectivo para estar presentes y votar en la próxima ocasión para los presupuestos del año que viene. Se atreven a decir que no están conformes, que quieren forzar otro pleno para tumbar el presupuesto. No salgo del asombro. Los que mandan son malillos, pero los de la oposición hacen que los que manden sean angelitos al lado suyo.