El Consell insular ultima el pliego de condiciones para sacar a concurso público, en breve plazo, una concesión hostelera en el Llatzeret. Se trata -apunta el conseller Simón Gornés- de una residencia a modo de hospedería para alojar a los usuarios del islote, aunque «se están explorando otras vías» para poder ampliar el alcance del futuro servicio de alojamiento a otro tipo de visitantes y mejorar así la gestión del histórico recinto.
«La normativa actual solo permite este uso, pero estamos mirando de ampliar el concepto», anuncia el conseller. El proceso, explica, es «complicado», aunque «en pocas semanas» espera disponer ya del estudio de equilibrio económico necesario para poder fijar las condiciones de la privatización del servicio y garantizar así su futura viabilidad. Es, ahora mismo, la actuación más «ambiciosa» que se plantea en el emblemático islote, ubicado en el corazón del puerto de Maó.
El plan director de usos del Llatzeret aprobado en 2020 ya preveía la transformación del edificio principal del complejo en un exclusivo hotel provisto de piscina y zonas exteriores, con un gran jardín y restaurante. La inversión necesaria para rehabilitar los edificios que debían acoger estas instalaciones se cifraba en 3.661.488 euros, por lo que de momento se va a externalizar su explotación.
El conseller de Medio Ambiente, Cooperación y Reserva de Biosfera ya dejó claro al acceder al cargo que el recinto amurallado es tan grande y son tantas las actuaciones de restauración que cabe acometer que la institución no dispone ni de personal ni de recursos suficientes para, además, gestionar directamente una residencia y servicios de restauración.
Pero sí entra dentro de sus posibilidades actuales construir un centro de interpretación que explique la historia del islote. El Consell promueve ahora el proyecto con la intención de que se pueda diseñar este mismo año y ejecutar a lo largo de 2026.
Simón Gornés aventura que podrá financiarse con cargo al próximo presupuesto de la institución o al remanente de liquidación del presente ejercicio. Su pretensión es crear un espacio divulgativo y expositivo que vaya más allá del pequeño museo existente en la actualidad en la sala de conferencias, tal como contempla el plan director.
El Consell ha aprobado este año un presupuesto de 2.309.847’18 euros para destinarlo al Llatzeret. Esta partida incluye tanto las retribuciones del personal como el mantenimiento de la maquinaria, el jardín y las embarcaciones, los servicios de limpieza y seguridad, la reposición de mobiliario y las actuaciones de restauración del patrimonio. También reserva 250.000 euros a inversiones.
El próximo 1 de abril hará diez años que la gestión del Llatzeret está en manos del Consell. El islote, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1993, era utilizado desde 1967 hasta entonces por el Ministerio de Sanidad como una lujosa residencia de veraneo para sus funcionarios y altos cargos. También se hospedó en ella la ministra Leire Pajín, generando una polémica que aceleró el traspaso, primero al Govern balear y, después, al Consell.
Durante esta década, el Consell insular ha fomentado las visitas públicas para que los menorquines pudieran conocer las 11’5 hectáreas y los 15.000 metros cuadrados que suman los 41 edificios de la antigua fortaleza, construida a finales del siglo XVIII.
A la vez, ha impulsado un proceso de restauración y puesta en valor del antiguo recinto sanitario en el que pasaban la cuarentena los enfermos de la época con el objeto de transformarlo en el centro neurálgico del turismo de congresos y eventos de Menorca. Desde 1985 acoge la sede de la Escuela de Salud Pública.
La UTE Eco-Llatzeret elaboró un plan director que cuantificó en 20 millones de euros la inversión necesaria para rehabilitar y reactivar todas las instalaciones actuales.
Suelo privado
Pero no todo el islote es público. Más de siete hectáreas de suelo rústico protegido son aún de propiedad privada. El terreno en cuestión salió a subasta el 30 de diciembre en el Juzgado de primera instancia e instrucción número 3 de Maó. Pese a que no se puede urbanizar, un postor llegó a ofrecer 981.751 euros, superando así el valor inicial de salida en un 1.458 por cien.
anti-socialcomunistas recalcitrantesNo veo que nadie diga que el anterior uso por parte de los funcionarios fuera irregular , era injusto que no es lo mismo . La verdad no conozco colonias de vacaciones para guardias civiles y no se de zonas de vacaciones públicas para sindicalistas . Simplemente creo que cada uno tiene que pagar sus vacaciones, y las administraciones solo deben sufragar en todo caso a gente desfavorecida y no a la casta funcionarios y chiringuitos gubernamentales. El dinero no es del consuelo es nuestro y queremos que lo administren con decencia. “ piensa el ladrón que todos son de su condición “