Eroski acaba de lanzar una campaña solidaria a favor de Càritas Diocesana de Menorca. Con el lema «Un lápiz que da esperanza», consiste en ofrecer a los clientes de los supermercados 3.000 divertidos lápices infantiles a cambio de 1 euro por unidad.
Con esta iniciativa, Eroski quiere contribuir a los programas de atención y acompañamiento que impulsa la entidad social, distribuyendo los lápices a través de todos los supermercados de Menorca.
Cabe recordar que mediante los proyectos que tiene en marcha, Càritas Menorca apoya «a las personas más vulnerables de la sociedad que están sufriendo en primera persona la crisis inflacionista que arrastramos desde hace un año», recuerdan los promotores de la iniciativa.
Durante la presentación, Joana Manresa, responsable de relaciones institucionales de Eroski, recordó el compromiso de la empresa con entidades del tercer sector. Por su parte, Lorenzo Lafuente, director de Càritas Menorca, destacó que «este tipo de colaboraciones son fundamentales para poder seguir desarrollando nuestros proyectos sociales».
... la pregunta de siempre... Cáritas depende de la iglesia, entonces me gustaría saber con cuánto colabora la iglesia para ayudar a los necesitados... o el flujo de dineros va sólo en una dirección...