El PP ha registrado una iniciativa en el Consell de Menorca, el Parlament, el Congreso de los Diputados y el Senado para exigir al Gobierno central que amplíe la oferta de destinos directos del Imserso desde Menorca y que se garantice un cupo mínimo de plazas para los residentes de la isla.
Los 'populares' han lamentado que, actualmente, los jubilados menorquines «sólo cuentan con cuatro destinos directos dentro del programa, hecho que limita sus opciones, obligándolos a hacer escala en Mallorca para acceder a otros destinos».
El PP ha considerado que «esta situación genera una clara discriminación territorial, ya que la oferta para los usuarios menorquines a día de hoy es muy limitada y reiterativa».
«La mayoría de destinos son de sol y playa y, si quieren acceder a viajes culturales o de salud, han de hacer escala en Mallorca», ha denunciado el diputado 'popular' en el Congreso Joan Mesquida quien ha apuntado que «aunque desde hace poco el Govern balear asume las pernoctaciones en Mallorca, los menorquines están claramente discriminados».
De la misma forma, el PP también ha reclamado la creación de un cupo mínimo de plazas reservadas para los residentes en Menorca que garantice una distribución equitativa, evitando que las plazas se agoten antes de que puedan acceder a ellas.
«La distribución prioriza a otras islas o territorios con mayor conectividad. Debería haber un sistema priorización o de rotación respecto de los usuarios. Se da la circunstancia que unos pueden repetir año tras año y otros no pueden ni acceder», ha añadido Mesquida.
Asimismo, los 'populares' han alertado sobre la brecha digital que sufren muchos mayores, ya que «la apertura de plazas en primer lugar sólo por canales online dificulta el acceso a quienes no manejan con facilidad las herramientas digitales, y cuando se habilitan inscripciones presenciales, ya no quedan plazas disponibles».
El diputado ha remarcado que «el hecho de ser residente en Menorca no puede ser una penalización para acceder a un programa que, sin duda, constituye una política pública de gran valor social, cultural y económico que busca fomentar el envejecimiento activo y saludable entre las personas mayores, al tiempo que contribuye a dinamizar el sector turístico durante la temporada baja en muchos destinos españoles.
«El PP ha presentado ya muchas iniciativas para mejorar el programa y el Gobierno central sigue sin hacer caso», ha concluido.