Una turista alemana de mediana edad falleció a primera hora de la mañana de ayer en el hall de facturación del Aeropuerto de Menorca tras sufrir un infarto, sin que los efectivos de la ambulancia de emergencias del 061 que acudieron en su auxilio pudieran hacer nada ya por salvarle la vida.
Según las informaciones recabadas por este diario, la pasajera se sintió indispuesta tras facturar su equipaje. De inmediato, las personas que la acompañaban requirieron asistencia sanitaria pero, como quiera que el Aeropuerto no tiene contratado servicio médico alguno, tuvo que derivar la emergencia al 061. Hasta la llegada de la ambulancia, tan solo se la pudo socorrer haciendo uso de uno de los dos desfibriladores de la terminal. Los intentos fueron estériles.
Fuentes de AENA precisaron ayer a este diario que, si bien el Aeropuerto disponía de servicio médico hasta hace dos años, éste se suprimió por los recortes presupuestarios, ya que solo se obliga a tenerlo a los aeródromos que acumulan más de 8 millones de pasajeros al año. El de Menorca apenas sobrepasa los dos y medio.
Pese a ello, el año pasado, se contrato una asistencia médica privada, a cargo del Grupo Juaneda, pero el acuerdo finalmente no se renovó. Desde entonces, los casos leves se atienden desde la misma farmacia del Aeropuerto y las graves se desvían al 061. Asimismo, se dispone de dos desfibriladores, uno en la zona de salidas y otro en la de llegadas.