Agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional de Ciutadella patrullaban en la noche del jueves por las calles de Ciutadella en coches camuflados para tratar de sorprender al pirómano, solo o acompañado, que se había dedicado a provocar el incendio de hasta diez contenedores de basura y residuos en siete puntos diferentes de la ciudad, entre las 20 y las 23.30 horas. La investigación continúa este viernes.
El operativo de vigilancia se mantendrá en la noche de este viernes con el refuerzo de varios agentes, ante la eventualidad de que se repitan estos actos de vandalismo.
Esta oleada de atentados al mobiliario urbano de por la noche se sumó a los tres contenedores que habían quedado calcinados el miércoles en la calle Mestral, de Cala en Blanes, y que también pudieron haber sido incendiados por la misma persona.
Los primeros conatos de incendio tuvieron lugar en un contenedor de la calle del Camí de Sa Farola, y apenas 20 minutos después, en la calle Vorera des Moll. Los bomberos de Ciutadella actuaron con rapidez e impidieron que los recipientes ardieran por completo. A las 22.02 ardía el tercero en la calle Mercadal, éste calcinado por completo.
Le seguía uno más en la calle de la Pau, a las 22.19, abortado por los bomberos en la ruta que seguían tras actuar en el anterior. Los dos siguientes comenzaron a prender en la calle Signe Aries, en Sa Caleta.
Cuando la situación parecía controlada los bomberos y la Policía Local tuvieron que partir hacia las calles Torre de s'Aigo y Avenida Cales Piques, en Cala en Blanes, pasadas las 23.30 horas, donde habían comenzado a arder otros cuatro contenedores en total que quedaron prácticamente calcinados.