Ocurrió el pasado domingo cuando el «Yellow Catamaran» amarraba en el muelle comercial tras transportar al grupo de personas que habían realizado la visita a la Illa del Rei. Una mujer granadina, que acompañaba al grupo de voluntarios por tercera vez, junto a unos familiares, perdió el equilibrio y acabó en el agua provocando un susto generalizado.
Su hermano se lanzó enseguida a por ella y los trabajadores de la embarcación se encargaron de subirlos a tierra. Pasado el susto, sonrisas como siempre, entre todos, como destaca el general Luis Alejandre, presidente de la Fundación del emblemático edificio del puerto de Maó.
«Yo no lo conozco». En las próxima semanas se juzgará a un hombre de 44 años acusado de un delito de receptación por haber vendido una tablet robada en una vivienda particular de Cala en Porter, en un establecimiento de Maó.
El fiscal le pide un año de prisión por ese delito, que su abogado, José Juan López, tratará de demostrar que no fue tal. Y es que su defendido, asegura, acudió a realizar la venta por encargo de su compañero, al que describió con todo lujo de detalles ante la policía. Sin embargo aquél, listo él, dice que no tiene ni idea de quien es esa persona. «Si te he visto no me acuerdo», y lo cierto es que éste no ha sido acusado porque solo se ha averado el responsable de la venta de la tablet robada.
Embargo por no pagar la cuota del 'poli'. Una pareja de Maó, que asegura ingresar solo una prestación por su hijo de 430 euros, ya que ambos están en el paro, ha visto como la oficina de recaudación del Ayuntamiento de Maó le embargaba 300 euros de su cuenta por el impago de la cuota del gimnasio del polideportivo durante los años 2011, 2012 y 2013.
La mujer asegura que al vivir en el campo no habían recibido las notificaciones previas de reclamación aunque, «no entiendo por qué han seguido acumulando las cuotas cuando mi marido ya no lo usaba desde que le dijeron que no podía entrar porque no había pagado, en 2009».
¿Dónde está la baja?. La pareja admite que no han podido demostrar que presentaron la baja entonces, «pero es absurdo y estamos en una indefensión total pese a haber acudido incluso al juzgado. No pueden embargarnos estando en esta situación, y el próximo mes, si alguien no lo remedia, nos cargarán otro embargo porque la deuda que es de 785 euros».
Disputa con la mujer, marihuana y final feliz. Un hombre ha sido absuelto de un delito contra la salud pública tras haberle sido descubiertas 17 plantas de marihuana en la azotea de la calle San Manuel de Maó tras una fuerte discusión con su mujer a la que había dejado en la calle sin que pudiera entrar. Ésta avisó a la Policía y cuando los agentes llegaron y entraron en la casa advirtieron la existencia de las plantas.
Su abogado, Ignacio Florit, demostró en el juicio que el cultivo de la 'maría' era para consumo de la propia pareja, dada su adicción, y en ningún caso para traficar con ella.