La Policía Local de Ciutadella ha multado en los últimos días a cuatro personas jóvenes por realizadas pintadas callejeras, respondiendo a una campaña preventiva para evitar esta práctica que deteriora bienes públicos y privados y está penada en la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana.
La central ciutadellenca había tomado esta iniciativa debido al aumento de grafitis en diversos espacios de la ciudad durante las últimas semanas. El denominador común en muchos de ellos es la aparición de la firma «A.C.A.B.» acrónimo internacional que utilizan seguidores radicales de clubes de fútbol, colectivos izquierdistas y grupos de cultura alternativa para insultar a las fuerzas del orden. All cops are bastards es la frase abreviada, es decir, «todos los policías son bastardos».
El primer joven multado por la Policía Local de Ciutadella fue un hombre de 24 años, natural de Brasil y residente en la ciudad, por realizar una pintada en una de las paredes del campo de fútbol de Sant Antoni el pasado jueves, 9 de febrero. Fue descubierto por una patrulla de la Policía Local sobre las 21 horas y le intervinieron un spray de color azul. También aparecieron otras pintadas en las paredes del campo del Sami.
Dos días después este mismo joven, a quien la Policía sitúa como principal responsable de muchos de los grafitis aparecidos en las últimas semanas, volvió a ser denunciado tras sorprenderlo los agentes en actitud sospechosa poco antes de las 5 de la mañana. Los policías encontraron un bote de pintura negra bajo un coche con el que, supuestamente, había vuelto a realizar pintadas en una fachada del edificio situado entre la calle Rafael Oleo Quadrado con la Avenida Conqueridor. Esta pintada llevaba la firma antes señalada, tras la leyenda «Zona Antifa».
Ese mismo día la Policía Local multó a otras tres personas por realizar pintadas. Se trató de una joven española de 18 años, residente en Alaior, un hombre de 21 años, también español, residente en Es Castell, y otro británico de 22 años residente en el mismo pueblo. Los tres fueron denunciados por realizar pintadas bajo el puente del Canal Salat, a la altura del Camí de Sant Joan de Missa.