In dubio pro reo, o lo que es lo mismo, en caso de duda siempre se favorece al acusado. Ese fue el principio básico sobre el que José de Juan López, abogado del exconcejal de Ciutadella, Llorenç Casasnovas, estructuró su defensa en la vista oral celebrada ayer en el Juzgado de lo Social.
El controvertido empresario, con antecedentes penales no computables, acabó aceptando una sentencia condenatoria de tres meses de prisión por haber propinado un puñetazo a otro hombre de Ciutadella, de la misma edad, el 3 de julio de 2015 en la terraza de un bar del Polígono Industrial. No quedó demostrado que las graves lesiones sufridas por la víctima se debieran a la agresión, entre otras cosas, porque la víctima no denunció lo sucedido, no acudió ayer al juicio, ni tampoco presentó abogado ni testigos del incidente. Fue uno de ellos quien había denunciado a Casasnovas ante la Policía Nacional tres días después, lo que supuso la detención del exconcejal que negó entonces ante el juez ser responsable de esas lesiones.
P.S.E., tras su caída, quedó inconsciente, con convulsiones, y tuvo que ser evacuado al Hospital de Son Espases debido a un traumatismo cranoencefálico y otras lesiones por las que estuvo 11 días ingresado y 120 de baja.