Maó de 10.000 euros con la que eludir su ingreso en el Centro Penitenciario de Menorca. El joven de 25 años, americano de Nueva York, que el domingo atropelló al ciclista Phillip John Rasmussen en la carretera de Alcalfar causándole la muerte, declaró ayer ante la jueza sustituta de ese juzgado por espacio de más de dos horas sobre las causas del fatal accidente. Posteriormente quedó en libertad provisional.
El hombre, detenido tras el siniestro, pasó el domingo en los calabozos de la Compañía de la Guardia Civil, en Maó, hasta que ayer lunes fue conducido a la sede judicial por dos agentes del Instituto Armado en el furgón de atestados. Ha quedado imputado por un delito de homicidio imprudente y deberá presentarse cada día en el Juzgado hasta que satisfaga la suma requerida en el plazo establecido. Le fueron retirados el pasaporte y la licencia para conducir como medidas cautelares.
En el test de alcoholemia que le practicó la Guardia Civil de Tráfico minutos después del accidente, el hombre arrojó una tasa de 0,35 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, es decir solo 10 miligramos más de lo que permite la legislación española. Sin embargo el joven, que quedó en estado de shock tras el accidente mortal, también dio positivo en el test de drogas. Admitió haber consumido anfetaminas y le fue hallada una bolsa con algunas pastillas de esta sutancia química con efecto estimulante dentro del vehículo.
El fiscal pidió prisión provisional eludible bajo fianza y finalmente, tras acuerdo con la defensa del acusado, se acordaron las medidas señaladas que evitaron su entrada en la cárcel a condición de que ingrese los 10.000 euros en el plazo de diez días. Las diligencias continúan abiertas y deberán completarse en la fase de instrucción que derivará en el juicio al acusado por el delito de homicidio imprudente
El padre del autor del atropello viajó el mismo domingo por la noche desde Nueva York para estar junto a su hijo tras conocer su situación y llegó a Menorca durante la tarde de ayer.
El joven había pasado una semana de vacaciones en la Isla junto a varios amigos y amigas de su mismo país de origen, pero estos ya habían regresado a Estados Unidos durante los dos días anteriores. El debía hacerlo el mismo domingo por la tarde. Al parecer, por la mañana paseaba por aquella zona de la costa sur de la Isla en su último día de estancia en Menorca. Conducía por la carretera de Alcalfar en solitario al volante de un Opel Corsa de alquiler y sufrió un despiste en la conducción que provocó el trágico accidente cuando no pudo evitar al ciclista inglés de 47 años de edad, director financiero de una compañía tecnológica en Cardiff, al que atropelló. El hombre murió a causa de politraumatismos y una hemorragia cerebral. Ayer le fue practicada la autopsia.
Arrepentimiento
El conductor ha mostrado su profundo arrepentimiento por el desenlace irreparable del accidente y ayer quiso pedir perdón a la familia de la persona fallecida, que tenía segunda residencia en la Isla, en S'Algar.
El neoyorkino admitió el despiste y haber consumido anfetaminas aunque al parecer comentó que el ciclista realizó un giro extraño hacia la izquierda en el cambio de rasante y no tuvo tiempo de reaccionar.
El ciclista inglés impactó contra el cristal del vehículo y posteriormente fue directo al asfalto. Phillip John Rasmussen ha sido la primera víctima mortal este año en las carreteras de la red viaria insular.
El joven, que pasó la noche en los calabozos de la Guardia Civil, fue conducido ayer ante el juez en el furgón de la Benemérita. Fotos: JAVIER COLL