Los bañistas que ocupaban la playa de Cala en Bosc se vieron sorprendidos este sábado por la tarde por un sorprendente remolino de viento en el centro de la cala. El fenómeno ocurrió sobre las 14.15 horas y tuvo alrededor de un minuto de duración, en el que salvavidas y algunas sombrillas volaron por los aires, como se aprecia en las imágenes del vídeo, sin que hubiera que lamentar ningún herido.
El remolino de viento, que se formó a causa de las corrientes térmicas, es el segundo del que se tiene conocimiento en una playa de Menorca en lo que va de verano tras el ocurrido el pasado 10 de julio en la de Binibèquer. En aquella ocasión resultó de mucha mayor intensidad que el ocurrido en Cala en Bosc, aunque en este último caso alcanzó una altura superior al de entonces, es decir, por encima de los 20 metros.