Tres vehículos con tres dotaciones del Parque de Bomberos de Ciutadella tuvieron que intervenir la tarde de este sábado para sofocar un incendio declarado en una parcela de la finca Vinya Gran, a la altura del kilómetro 41 de la carretera general.
Se trataba de una quema controlada de matojos, pero al parecer una astilla procedente del bidón y el viento hicieron que las llamas se extendieran y acabaran afectando a unos 7.000 metros cuadrados, lo que obligó a que los bomberos tuvieran que descargar 8.000 litros de agua para completar la extinción del incendio, que llegó a causar cierta alarma.
Agentes de la Policía Local de Ciutadella también se personaron en el lugar del fuego, que se declaró sobre las 15.30 horas.