Los ocho argelinos adultos que llegaron a la costa de Sant Lluís en patera en la madrugada del martes quedarán en libertad a lo largo de este miércoles. La ausencia de plazas disponibles en los siete Centros de Internamientos de Extranjeros que hay actualmente en España motiva su puesta en libertad inmediata ante la imposibilidad de que puedan ser trasladados a alguno de estos complejos.
En el momento que queden libres una vez se completen las diligencias en el departamento de Extranjería de la Comisaría de Policía de Maó, los ocho han sido conducidos hasta la sede de la Cruz Roja, en Maó.
Sobre las 14 horas los ocho inmigrantes de entre 20 y 30 años de edad, han quedado libres porque no han cometido ningún delito concreto más que su entrada ilegal en territorio español. Esta anomalía sigue un cauce administrativo que no implica la privación de libertad.
Ha sido la Cruz Roja de Maó la que acudió a recogerlos a la Comisaría para trasladarlos a su sede.
Esta organización benéfica es la encargada de prestarles ayuda mientras permanezcan en la Isla durante el tiempo en el que se tramite el expediente de devolución a su país.
Cruz Roja ha gestionado su alojamiento provisional con los servicios sociales del Ayuntamiento de Maó y han sido ubicados en la Casa de Acogida de la ciudad, gestionada por el Consistorio. Existen plazas disponibles para los ocho y allí han quedado instalados durante la tarde tras su paso por la organización benéfica.
Las fuerzas policiales estarán más pendientes de sus movimientos en una especie de libertad controlada dado su desconocimiento del entorno en el que van a desenvolverse.
Los ocho detenidos han pasado la noche en los calabozos de la Comisaría de Maó, mientras que los dos menores ya ingresaron ayer en la Casa de la Infancia de Maó después de que los Servicios Sociales del Consell se hayan hecho cargo de ellos.