La propietaria del restaurante Es Cactus, en Platges de Fornells, ha denunciado la agresión que sufrió el domingo por la tarde a cargo de un cliente agresivo que estaba en desacuerdo con la cuenta de la comida y las consumiciones que había tomado junto a otros dos comensales.
Según ha explicado la mujer y otros testigos de los hechos, los tres hombres que residen temporalmente en la urbanización mientras trabajan en la construcción de un conocido restaurante en el Polígono Industrial de Maó, estuvieron molestando al resto de clientes durante la comida. Varios de ellos, incluso, se cambiaron de mesa para no ser inquietados debido a su actitud poco respetuosa.
Finalmente la dueña del local instó a los tres hombres a que se marcharan cuando ya habían concluido la comida y las copas, «pero seguían con ganas de armar alboroto con las otras personas y los camareros», indica.
Fue entonces cuando uno de ellos le golpeó en el rostro, afectándole un ojo, cuando esta le insistía en que debían marcharse. Según ella, su agresor, que rompió algunos enseres de la barra, lo que le provocó un corte en el brazo, dijo que invitaba a otros comensales cuando se le hizo ver que los estaba molestando, pero en el momento de pagar estuvo en desacuerdo con la factura de 230 euros.
Típico bully de pacotilla... mucha bravuconería y poca materia gris