Dos jóvenes en actitud sospechosa llamaron la atención de una de las patrullas de servicio de la Policía Nacional, de la Comisaría de Maó, el pasado lunes por la noche cuando circulaban por la calle Fort de L'Eau, de Maó. Los agentes decidieron entonces, proceder a su identificación y, finalmente, acabaron descubriendo que uno de ellos llevaba encima una cantidad de cierto tipo de droga poco frecuente en la Isla, conocida como ‘tusi' o cocaína rosa, de efectos muy negativos para el organismo.
Los policías procedieron a detener al joven que portaba cinco pequeñas bolsas de plástico. Los recipientes contenían, en total, 30 gramos de polvo de esta sustancia de color rosa que resultó ser la variante de la cocaína señalada. Además los agentes le intervinieron cerca de 1.500 euros que también hallaron entre sus pertenencias, lo que le ha supuesto una acusación del delito contra la salud pública con sustancias que causan grave daño al organismo, bajo el convencimiento de que el joven estaba traficando con ellas, lo que explicaría la cantidad de dinero que llevaba en sus bolsillos.
El detenido, un joven español de 21 años de edad, fue conducido a Comisaría y al día siguiente, trasladado al Juzgado de Instrucción número 1 de Maó, donde prestó declaración ante el juez de guardia. Este, de acuerdo con el fiscal, dictó el auto de libertad provisional mientras se completa la instrucción antes de la próxima celebración del juicio por este caso.
El apunte
Una droga más nociva que puede llegar a provocar la muerte
La ‘tusi’, como se conoce a esta variante de la cocaína, es la primera vez que resulta intervenida por la Policía Nacional en Maó, lo que ha puesto más en guardia a las fuerzas del orden ya que se trata de una droga más peligrosa. Es una sustancia que se empezó a elaborar en los años 70 pero cayó en desuso por sus efectos perjudiciales para la salud. Está compuesta por ketamina, LSD y MDMA y las consecuencias que puede producir son delirios de persecución incontrolados, paranoia, ataques de pánico y coagulación de la sangre en pulmones, corazón y cerebro con resultado de muerte. Su fórmula combinada, efectos y nivel de adicción la sitúan en una escala alta de peligrosidad.