Una mujer fue condenada este martes a un año de prisión y a indemnizar a la propietaria de la casa en la que vivía como alquilada por haberse apropiado de parte del mobiliario del piso cuando expiró el contrato de arrendamiento.
La acusada, de nacionalidad española, aceptó los cargos en el juicio a prevención celebrado en el Juzgado Penal. Su abogado, el de la acusación y la fiscal pactaron un acuerdo para rebajar la condena inicial que era de 2 años de prisión por un delito de apropiación indebida. Así, se suprimió el agravante de abuso de confianza y la pena se quedó en un año más el pago de la indemnización a la propietaria de la vivienda, un piso ubicado en la calle Pintor Calbó, de Maó.
El valor de los muebles que se llevó la inquilina cuando finalizó el contrato es de 1.360 euros, que será la cantidad que la mujer deberá abonar a partir de ahora a la dueña del inmueble, fraccionada en cuatro pagos.
Los hechos se remontan al periodo de alquiler entre octubre de 2016 y octubre de 2020. La acusada se quedó con diversos muebles de la casa cuando la abandonó, que habían sido convenientemente reflejados en el inventario realizado al inicio de la relación contractual. A pesar de los requerimientos de la dueña para que se los devolviera, la acusada no lo hizo, de ahí la interposición de la denuncia que derivó en el juicio celebrado este martes.
Una vez leída la sentencia por el magistrado-juez, el abogado de la mujer solicitó la suspensión de la pena de prisión a la que no se opusieron ni la acusación ni el fiscal. La condena de reclusión quedó suspendida siempre que la mujer no vuelva a delinquir en el plazo de dos años y cumpla con el pago de la indemnización por los muebles de los que se apoderó. También deberá pagar las costas del juicio.