La Guardia Civil ha abierto una investigación para dar con el autor o los autores del sorprendente robo de entre 50 y 60 balas de paja en la finca Lluriach, situada en el Camí de Tramuntana, a tres kilómetros de Es Mercadal, cometido en la madrugada del pasado día 16. El payés de la finca, Joan Marqués, sospecha que detrás del robo están propietarios de caballos.
No consta que haya habido otros hurtos similares en la zona estos últimos días aunque sí se han producido de menor volumen en una finca de Es Migjorn tiempo atrás.
La sustracción se hizo de noche, aprovechando la luna llena para ver en la oscuridad sin accionar las luces del camión que debía transportar las balas, e incluso del tractor también necesario para cargarlas junto al camino. Joan Marqués reafirmaba ayer que los responsables del robo sabían lo que hacían, lo tenían preparado, y a qué hora podían cometer el delito.
Sus sospechas se centran en propietarios de caballos «porque muchas personas tienen uno o varios de estos animales, pero luego se dan cuenta de lo caro que es el forraje para alimentarlos a diario». Reflexiona que la sociedad actual «quiere llegar a todo y no puede, quiere un caballo pero paga impuestos, vivienda...» , para luego atentar contra la propiedad ajena.
Jo crec que s'ha de començar a mirar entre els polítics, que tothom diu que son uns lladres i si sa gent ho diu no fora estrany que s'hagin organitzat al marge dels partits, per fer negoci amb ses bales de palla, perquè sa gent vulgar i corrent no roba...