Repetir la cifra de los 1.200 calendarios vendidos en 2015 sería una buena noticia, pero en la asociación de padres de niños con cáncer de Balears (Aspanob) aspiran a despachar alguno más. «No bajamos la guardia, la superación es algo muy importante para nosotros», apunta la representante en la Isla de la entidad, Joana Torres.
Eso no quita que estén contentos con el resultado conseguido el año pasado, con una recaudación de 11.000 euros, después de haber sufrido durante varias campañas los efectos colaterales de la crisis.Pero tal y como explica Torres, ellos siempre miran hacia adelante, y es por ello que ayer pusieron en marcha el trabajo para la edición del nuevo calendario solidario, el séptimo de su historia, que pretenden poner a la venta la primera semana de diciembre.
De nuevo con la colaboración de los bomberos de AENA y los del Consell, el aeropuerto acogió ayer una sesión fotográfica con la que se ilustrará cada uno de los meses de 2017. Una decena de fotógrafos se encargaron de captar con sus instantáneas el mensaje que quieren transmitir con el almanaque del año que viene: luchar por el futuro y el afán de superación.
Los protagonistas de las fotografías volvieron a ser los niños enfermos de cáncer, pero como un elemento más de esa gran familia de Aspanob, también integrada por amigos, familiares y colaboradores.