Los Red Arrows han volado de nuevo sobre el cielo de Menorca, a pesar que una fuerte lluvia que había caído horas antes había amenazado su exhibción. Las acrobacias que los nueve aviones de la Royal Air Force han realizado en la costa sur de Sant Lluís han sido seguidas por numeroso público.
En total la patrulla aérea británica ha realizado veinte ejercicios, divididos en dos partes. En la primera, han participado los nueve aviones al completo; y en la segunda, se han realizado ejercicios más individualizados, siendo el más espectacular de ellos un tirabuzón en el aire. Los aviones han concluido su demostración realizando un chorro de humo con el número cien, para celebrar los cien años de la Royal Air Force y que ha sido dedicado a un piloto británico de la II Guerra Mundial residente en la Isla y que ha presenciado los ejercicios.
La exhibición se ha interrumpido durante unos siete minutos, dado que un avión ambulancia debía entrar en servicio en el aeropuerto.
Es la cuarta vez en siete años que los aviones de los Red Arrows realizan una demostración en la Isla.