Tiburones de diferentes especies, mantarrayas, peces asombrosos, corales, atolones y unas islas paradisiacas son algunas de las maravillas con las que se han encontrado un grupo de doce submarinistas de Ciutadella que han efectuado un viaje a Maldivas para practicar su afición.
Los expedicionarios eran miembros de la sección de escafandrismo del Club Nàutic y de Dive inn Menorca. Estuvieron en este archipiélago del Índico del 11 al 17 de noviembre y ayer regresaron a Menorca.
«Ha sido una experiencia inolvidable», asegura Vicent Servera Carreras, uno de los menorquines que participaron en el viaje y que destaca la cantidad de vida marina, la belleza del paisaje y el haberse encontrado con un mundo muy diferente al de su Isla natal.
La expedición menorquina se juntó en Maldivas con un grupo de diez personas de la península y juntos se dedicaron a efectuar entre tres y cuatro inmersiones al día.
El grupo de submarinistas españoles celebrando una fiesta nocturna. El pez en primer plano está hecho de arena.
La República de Maldivas es un inmenso archipiélago compuesto por unas 1.200 islas, de las cuales solo visitaron cinco. Pudieron conocer desde una isla en que solo había arena, hasta la totalmente urbanizada Malé donde está la capital del mismo nombre que, con una población de 103.693 habitantes, es una de las ciudades más densamente pobladas del mundo. La superficie de Malé es de solo 5,79 kilómetros cuadrados.
Un sistema de barcas taxi o barcas bus les permitió ir de un lugar a otro y conocer así, entre otras, una isla que Servera no duda en describir como las que se pueden ver en el programa «Supervivientes» y en la que celebraron una fiesta a la luz de los fanalillos y la luna llena.
La experiencia en el Océano Índico incluía nadar entre los inofensivos tiburones nodriza, contemplar un tiburón ballena y, con más respeto, bucear cerca de escualos de punta blanca y punta negra, así como con espectaculares mantarrayas. «También vimos -afirma Servera- gran número de tortugas marinas. Fue maravilloso».