Las urbanizaciones costeras de Menorca dedican uno o dos fines de semana cada verano a disfrutar de sus particulares fiestas. Tienen varios elementos en común, como los juegos infantiles, las cenas entre vecinos, la música en distintos formatos o los concursos. Algunas cuentan con gigantes, otros con espuma, todo ello siempre aderezado con la diversión y el buen ambiente de residentes y visitantes ocasionales.
El último fin de semana han coincidido en fiestas urbanizaciones como Es Grau, Sa Mesquida o S'Algar, cuyas asociaciones vecinales se han esmerado en organizar eventos muy concurridos que se han desarrollado, además, entre las suaves temperaturas de estos días. Los niños lo disfrutan con especial efusividad, aunque los mayores tampoco se quedan cortos.