Dos mujeres jubiladas originarias de Reino Unido, Linda Trestrail, de 69 años, y Wendy Russell, de 71, aterrizaron por error el pasado 26 de septiembre en el aeropuerto de Menorca y no en el de Son Sant Joan, en Palma, donde tenían previsto desembarcar para iniciar sus vacaciones en Mallorca.
Las dos amigas, según informa el tabloide británico 'Daily Mail', denuncian que nadie advirtió el error y que se dieron cuenta de que estaban en el avión equivocado cuando el capitán de la aeronave anunció que estaban a punto de aterrizar en Menorca.
Hasta cinco miembros del personal revisaron los billetes, aseguran las mujeres, y ninguno de ellos se dio cuenta de que estaban permitiendo a las dos pasajeras embarcar en el vuelo equivocado. La empresa con la que habían contratado sus vacaciones, Jet2, alega, según el 'Daily Mail', que se trata de un «error humano» causado en parte por un proveedor externo de asistencia especial en el aeropuerto de Bristol que debía ayudar a las dos amigas británicas, que tienen una discapacidad reconocida.
«Se desató el infierno», aseguran las dos mujeres, cuando relatan el momento en el que el capitán del avión avisó la inminencia del aterrizaje en Menorca. Critican que cuando avisaron a los tripulantes de cabina de la situación «una azafata se echó a reír». El capitán, aseguran, dijo que nunca había visto un error así en toda su carrera.
«Se oye hablar de maletas que van en vuelos equivocados, pero no de personas», explican las británicas afectadas, que reconocen que todavía están esperando recibir alguna compensación por lo que consideran fue «un catálogo de desastres».