En defensa del Aeroclub
Me resulta un orgullo que la isla de Menorca cuente, hace más de 40 años, con un aeroclub que con mucho sacrificio mantiene actividades de aviación general y deportiva en sus instalaciones, las cuales, actúan como diversificación a la economía isleña, además del prestigio que supone el tráfico de avionetas, evoluciones que envidian muchas ciudades importantes del país.
La sanción que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea a impuesto al Aeroclub resulta impagable y por tanto su defunción está cantada. Con injustas decisiones como la que nos ocupa, no me extraña que España sea la nación que tenemos en nuestro entorno que cuenta con menos aeroclubes, incluso Portugal, siendo el retraso importante.
Creo honestamente que el Delegado en Baleares de AESA, siendo competente sobre el Aeroclub, antes de proceder a levantar una sanción que hiere de muerte a la Entidad, les debía haber comunicado que con los vuelos de vigilancia forestal se estaba cometiendo delito de Ley, porque aquí, al contrario, pensábamos todos que se realizaba una labor social altruista convenida con el CIM.
Mucha gente tiene tendencia a no manifestarse en cuestiones que no son de su competencia pero se equivocan ya que en la rueda de la economía hasta el panadero sale perjudicado y Menorca ya ha perdido demasiadas competencias.
Antonio Pons Villalonga
Maó
Ruido toda la noche en Son Bou
n En la noche del sábado pasado que coincidió con las fiestas de Alaior, en la Urbanización de Son Bou y la Urbanización de San Jaime no se pudo dormir en toda la noche por culpa del ruido (no música) que provenía de un chiringuito de la playa que se prolongó hasta pasadas las 9 de la mañana.
Me consta de las quejas de clientes del hotel y otros vecinos de la urbanización a los teléfonos asignados para tales circunstancias. Todos estamos de acuerdo en que es verano y queremos fiesta. Pero esto es una falta de respeto a todos los que se hospedan o viven en la zona. Hay espacio y tiempo para todo.
Estamos en el mes de más ocupación del año, que se puede decir que se cuelgan carteles de lleno. ¿Qué imagen queremos dar a los visitantes de nuestra maravillosa isla? ¿Cómo pueden permitir las autoridades competentes tales atropellos? Cada verano ocurre lo mismo. Falta de control y dejadez de las autoridades competentes. Se supone que hubo varias llamadas telefónicas y es una vergüenza que hasta la hora del desayuno en los hoteles nadie se molestó en ir a parar, como digo, el ruido (no música) de este chiringuito.
¿Qué opinión y que comentarán de nuestra isla en sus países de vuelta a casa? ¿Volverán el próximo año? ¡Qué vergüenza para Alaior! y ¡Qué vergüenza para Menorca!
Una vecina de San Jaime.
Jayne Ann Swinbourne
Sant Jaume / Alaior