Zona azul
Este año los Reyes Magos nos van a traer ciento diez plazas más de zona azul en Maó. Ciento diez plazas situadas en una zona donde no hace mucho los mismos responsables del Ayuntamiento sacaban pecho por haber creado unas bolsas de aparcamiento para poder descongestionar el centro de la ciudad. Unas plazas cercanas a la estación de autobuses, que podían contribuir al uso del transporte público, al poder dejar el coche en un lugar cercano a la misma. Unas plazas que servían para que las personas que venían de fuera de Maó, a trabajar o a consumir en la ciudad pudieran usarlas. Unas plazas para los vecinos. Realmente era un acierto tener una bolsa de aparcamiento en un lugar no demasiado alejado del centro. Pero los responsables del equipo de gobierno y en contra de la opinión de los demás grupos municipales, deciden convertirlas en zona azul, para poder compensar a la empresa Dornier, las plazas que se han perdido en el centro de la ciudad.
Unas plazas perdidas, por la visión de este equipo, de convertir el centro de Maó en una ciudad sólo para los que como ellos no trabajan, en una ciudad para pasear, donde cada día es más difícil poder ejercer una actividad laboral, comprar en ella, y por tanto crear puestos de trabajo, ya que lo que consiguen es despoblarla y arruinarla, por lo que tienen que prohibir la instalación de comercios en el Polígono Industrial, pues la mayoría de ellos se instalaría allí, donde podrían ofrecer un mejor servicio a los clientes, con facilidad de movilidad y aparcamiento. Es más, parece que todo el mundo se da cuenta del problema que representa el que el centro de Maó se está quedando cada día más vacío por culpa de las actuaciones municipales menos los responsables de las mismas, que después dicen hay que buscar fórmulas para dinamizar el centro para que no acabe de morir, cuando han sido ellos quienes lo han matado y desprestigiado con sus decisiones, como entre otros el lamentable espectáculo que ofrece el centro de la ciudad sobre todo estos días previos a las fiestas, con las calles llenas de cartones al mediodía, por el invento de recogida de cartón, que es tan tercermundista que ya han dicho que en verano no se hará, lo cual quiere decir que no daremos a los turistas la mala imagen que nos damos a nosotros mismos, pero en invierno es igual, como quedamos los cuatro gatos de siempre, pues no les importa, ya que nos conocemos todos y todos sabemos lo que somos y lo que son quienes nos gobiernan y el desprecio que demuestran hacia los administrados y la poca sensibilidad que tienen hacia sus problemas.
Prueba de ello y volviendo a la nueva zona azul, son las declaraciones del Sr. Llabrés cuando dice que "los residentes encontrarán maneras de aparcar cuando lo necesiten". Sí, seguramente que sí, ya que el populacho siempre encuentra soluciones para paliar el mal hacer de los administradores. Encontramos soluciones para aparcar, las encontramos para poder pagar la subida de impuestos para que ellos sigan cobrando, para hacer frente a las subidas de la luz, del gas, del transporte, para intentar salir del paro, en mi caso para mantener los puestos de trabajo que creé en el centro de Maó a pesar de ustedes, hasta que me canse de hacerlo que estoy muy próximo a ello, gracias a sus decisiones, etc. o hasta que nos colapsen y nos empobrezcan tanto que no los podamos mantener más, porque ustedes olvidan que cobran sus sueldos de nuestros impuestos y por tanto están a nuestro servicio, y no al contrario, aunque espero que también encontremos soluciones para que ustedes no sigan más en el Gobierno municipal. Y lo más grave es que además parece ser que todas estas decisiones las toman sin dar positivo, ya que según dicen sólo dan positivo (está probado) cuando no están en "horas de servicio", aunque yo creo que un representante municipal o gubernamental que representa a los ciudadanos esta siempre de servicio, hasta cuando duerme.
ALFREDO BENOSA MAJOS
Sant Lluís