Aclaración ante la actuación sanitaria realizada a un ciclista herido
Ante la noticia que hace referencia al Centro de Salud de Ferreries, respecto a la intervención de una dentista y una estudiante de Enfermería, comentada en su diario, el 16 de junio, de modo descriptivo erróneo y con un contenido en el que se desvirtúa la realidad de los hechos acontecidos, me veo en la obligación, como coordinador del centro y médico de guardia, el día en que ocurrieron los hechos de realizar unas puntualizaciones, ante las falsas informaciones que se han propagado y de cierta actitud difamatoria por parte de los comentarios que figuran al pie de la noticia por personas o más bine personajillos, que amparándose en el anonimato que la informática les permite, no dudan en meter cizaña y verter maldad en sus comentarios, con injurias y calumnias hacia personas cuyas intenciones en aquellos momentos desconocen, y me refiero a la valiente y gran profesional que es la estudiante de Enfermería Rosa Sánchez, de Ferreries, que ha sido injustamente tratada a través de los más graves comentarios difamatarios que no deberían permitirse desde el punto de vista ético y de una reclamación presentada el día 24, nueve días después del suceso acontecido, en contra de la actuación médica, que induce ciertamente a pensar, que esta persona que así ha actuado tan tardíamente, haya sido inducido o manipulado por terceras personas cuya finalidad es confundir y emponzoñar la opinión pública, ya que generalmente una reclamación se presenta en 2 a 3 días como máximo, tiempo en que está candente el suceso y no nueve días más tarde, pero por educación y cortesía no voy a entrar más en esta cuestión.La actuación médica por mí practicada se ajusta a los protocolos que tenemos ante pacientes que acuden a Urgencias con heridas tras sufrir una accidente, se les mira la consciencia, estado de las pupilas, control de la tensión arterial, frecuencia cardíaca y evaluación de las heridas recibidas, adoptando la actuación de acorde a la gravedad del accidentado. Después de evaluar a este paciente, me di cuenta por la experiencia de más de treinta años en el oficio, que lo único que presentaba eran dos heridas incisocontusas en región de la mejilla y en el surco nasogeniano inferior de pronóstico leve, y que presentaba otras dos avulsiones dentarias a punto de caer y una herida incisa en el labio inferior, que eran más importantes ya que la implantación de un diente de nuevo en el alvéolo dentario sólo permite una demora de cuatro horas, siendo luego imposible su regeneración mientras que las heridas tienen un intervalo de actuación más largo, a pesar de ello el ciclista en cuestión ha criticado mi modo de actuación, cuando él es un lego en la materia, y además se le administró una ampolla de Metamizol bebible, en un vaso de agua que me encargué yo mismo de preparar para contribuir a una sedación de dolor que le ocasionaban las heridas.
El Centro de Salud de Ferreries, hace 18 años que funciona en horario de sábados, domingos y festivos, de 9 horas a 14 horas, con un auxiliar administrativo y un médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, esto desde el año 2004, en que se constituyó como Centro de Salud, abarcando las poblaciones de Ferreries y Es Migjorn Gran, el resto de franja horaria pueden acudir de modo urgente al Centro de Salud de Canal Salat en Ciutadella o al Centro de Salud des Banyer de Alaior o llamar al 061, para que les oriente en la mejor opción por ellos considerada.
La enfermera DUE, después de haber pasado consulta en Es Mercadal y Es Migjorn Gran y haber realizado las curas y administrado los inyectables pertinentes, acude alrededor de las 11.30 horas del sábado y domingo a Ferreries, y permanece allí hasta las 14 horas, juntamente con el médico de guardia y el administrativo, realizando las pertinentes curas y administrando inyectables.
A continuación paso a relatar cómo sucedieron los hechos en la mañana del sábado día 15 de junio. A las 9 horas 15 minutos más o menos, acudió acompañado por otros varios ciclistas, un ciclista varón de 33 años, que había sufrido una caída en la bajada de la cuesta de s'Enclusa, entre los acompañantes se encontraba la susodicha estudiante de enfermería, quien bajo mi autorización realizó, y en ausencia de la enfermera del centro, las primeras curas y limpieza de las heridas, siempre bajo mi supervisión y autorización.
Una vez realizada la exploración neurológica pertinente, estado pupilar, respuesta a reflejos táctiles y visuales, pudimos apreciar que lo único realmente importante era la pérdida de varias piezas dentarias, con avulsion interna de varias de ellas y una herida en labio inferior así como dos heridas incisocontusas de tamaño mediano en la región de la mejilla y en la zona naso-geniana inferior, motivadas por el roce de la piel sobre el asfalto, una vez valorado el enfermo se le administró un analgésico por vía oral y se procedió a la sutura del mismo por mi parte y ayudado en todo momento y bajo mi autorización y supervisión, ya que soy el jefe de la guardia y decido quién me ayuda o colabora conmigo, por la mencionada estudiante de enfermería.
Existe hasta aquí, me pregunto yo, algún error u omisión en los protocolos de actuación ante heridos o negligencia de algún tipo, dónde están estos sres. y personal sanitario incluso, que emboscados bajo un pseudónimo se esconden tras comentarios de lo más soez, para desprestigiar dicha actuación, que salgan a cara descubierta, si es que tienen lo que hay que tener: agallas y dignidad, que en su caso carecen de ambas.
Una vez iniciado el proceso de sutura que hice ayudado por esta estudiante de enfermería que bajo mi supervisión, me ayudó con eficacia y con gran profesionalidad, cosa totalmente legal, otra cosa es que hubiera ayudado o suturado sin la presencia de un médico, como algún cínico pretende dar a entender, si el médico cree que la herida, no afecta a tendones ni nervios o vasos, delega en la enfermera del equipo, para que esta proceda a su sutura, esto es lo que está reflejado en los protocolos del IB-Salud, y tendrá que saberlo esta internauta que se titula diplomada en enfermería y no hace más que verter ponzoña y cizaña en sus comentario en la red.
A continuación la familia me pidió poder llamar a una dentista de la población, a lo que yo como jefe de guardia, di mi consentimiento, cosa que tendría que agradecer tanto el herido como sus familiares, pues es una persona ajena a la institución como es el IB-Salud de Menorca, no puede acceder si no es bajo permiso verbal del médico de guardia, a las dependencias de un Centro de Salud y hacer uso de material de sutura y curas como hizo, bajo mi autorización la excelente profesional de Odontología, Teresa Florit Pons, lo más facil par mí hubiera sido enviarlo al Hospital Mateu Orfila y desentenderme del accidentado, y allí o en otro cualquier centro de salud, no existe Cirujano Maxilo-Facial de guardia por lo que hubieran quedado atrapados en un callejón sin salida.
A tenor de eso, el enfermo salió del Centro con las heridas suturadas y las piezas dentarias implantadas, en menos de 3 horas, evalúen resultados y costes los señores entendidos, que amparándose en el anonimato que les facilita internet vierten su bazofia verbal, metiendo cizaña a diestro y siniestro, sentados cómodamente delante de una fría pantalla de ordenador, cual aves de rapiña, sedientas de carnaza, para desaprobar tan coordinada atención médica, en un medio rural cien por cien. Correcta la actuación desde el punto de vista profesional y ético, acaso no se atendió al enfermo correctamente, se le alivió el dolor, se le suturaron las heridas, previa aplicación de anestesia, se le implantaron las piezas dentarias por una odontóloga, no puede una ayudante de enfermería ayudar a un médico o una dentista intervenir y así ahorrar un penoso viaje al Hospital Mateu Orfila, el enfermo salió por su propio pie del Centro.
A pesar de ello hemos recibido tanto el que suscribe la carta, como la estudiante de enfermería, comentarios despectivos y atentatorios a nuestro honor y dignidad profesional, por gente de la población y por parte de algún miembro del ámbito sanitario que es tanto como tener el enemigo en casa, circunstancia esta muy normal en los tiempos que corren, donde los valores éticos y morales están por los suelos, y el concepto de humanidad y compañerismo es apenas un vestigio tan ancestral como las estufas de carbón.
Por otra parte vistos los comentarios atentatorios al honor y dignidad que se hacen tanto hacia mí como hacia la estudiante de enfermería, hemos instado las correspondientes denuncias ante la Guardia Civil, brigada contra delitos informáticos de la Comandancia de Menorca, por si hubiere manera de localizar a los sujetos que amparados por el anonimato, les sea interpuesta la correspondiente denuncia ante los juzgados y condenados por los delitos tipificados en el Código Penal.
Dr. Antonio Juanico Petrus
Coordinador Médico
del Centro de Salud
Ferreries