El maestro Manuel Luque Pascual, que falleció hace 6 años, profesor de cientos de chicos en Alaior en los años 50 y 60, residía en Es Mercadal. Era una mente lucida, acumulada de cultura y experiencia, fue mi primer profesor de la escuela del Ramal de Alaior, cuando yo tenía 6 años, esto era en 1951, y me dejó una huella inolvidable de su saber, ser, estar y formar a los niños. Tuve contacto con él y poder recordar aquellas vivencias, cosa muy satisfactoria para mi, me desplacé hasta su domicilio varias veces, y la verdad es que fue para mi recibir una lección magistral de su sabiduría, por unas horas parecía que estábamos en aquellos años 50. Con ello me di cuenta del cambio tan drástico con relación a aquellos años en las escuelas, que amén de cantar el «Cara al Sol» o rezar, lo importante era que respetábamos al profesor, cosa que actualmente muchas veces no ocurre. Aprendíamos que cuando él te daba una colleja era porque la merecíamos y si se lo decíamos a nuestro padre nos daba otra, pues decía que algo malo habríamos hecho. Ahora los padres, por suerte no todos, se enfrentan a los profesores aunque el chico/a tenga la culpa, que es casi siempre, por esto en docencia ocupamos el puesto 23º en el mundo, siendo el numero 1 Finlandia, donde los niños/as empiezan la escuela a los 7 años, pero están cinco años con el mismo profesor, y para cambiar a otro han de demostrar su valía.
El leer es primordial, cualquier libro por malo que sea tiene algo de bueno, al igual que todas las personas. Ojalá los políticos con sus propuestas, que siempre hay algo de aprovechable en todas ellas, aunque ellos sean de ideología diferente, si supieran aunar todas las propuestas y sacar lo bueno de cada una de ellas, mejor gallo nos cantaría, al igual que la persona más inculta, que no por ello deja de ser persona, con su experiencia se puede editar un libro.
Los padres, ahora y siempre, son los responsables de educar y los profesores de formarlos, si así se hace como mínimo de los niños/as saldrán personas, ademas de licenciados, sino ni una cosa ni otra. Actualmente hay un 25 por ciento de profesores que han sido agredidos en España, ya sea por alumnos o por los padres de estos, y un tanto por ciento superior teme por su integridad física. Viendo este panorama lo raro es que estemos en el 23º lugar de la enseñanza y no en el 80º .