El Gobierno nos informa de los ahorros y de los nuevos impuestos con los que pretende financiar las «mejoras» (sic) de las pensiones, fundamentalmente impuestos a las grandes empresas digitales y subidas en los impuestos especiales.
Se deja, sin embargo, en el tintero que los restantes impuestos, fundamentalmente el IVA, al aplicarse sobre precios aumentados por la inflación, también suben en el mismo porcentaje, aunque se recauden los mismos euros devaluados por la inflación con los que nos va a pagar a los pensionistas.