La semana pasada disfruté del maravilloso paseo desde Cala Galdana a Macarella y Macarelleta. Quedé sorprendido, en el inicio del camino, del deterioro de la pasarela peatonal ubicada al noroeste de la Cala.
El estado que presenta, tanto la estructura portante como las barandillas, es preocupante. El proceso de corrosión del acero que conforma la pasarela hace necesaria una intervención. Además, el aspecto es de abandono.
Soy arquitecto y visitante asiduo de la Isla desde hace mas de tres décadas. A lo largo de los años he ido constatando las continuas mejoras sobre el tratamiento del espacio urbano en los diversos municipios de la Isla.
El estado de conservación de la pasarela de Cala Galdana, supone para Menorca una «mancha» en su imagen.