La candidata del PSIB-PSOE a la presidencia del Govern, Francina Armengol, propugnó ayer, en su discurso de investidura, que España sea «muy pronto» un estado federal, y en este marco reclamó la aplicación de «un modelo de federalismo interior» para las Balears. Según Armengol, este hecho debe reforzar el papel de los consells insulars como primeras instituciones de autogobierno de cada isla.
Los compromisos de la candidata socialista en este ámbito incluyen «abordar el modelo competencial, el desarrollo del Estatut y una mejor financiación». Retos a los debe dar respuesta el próximo Govern formado por PSIB-PSOE y Més per Mallorca y Més per Menorca. Ello exige no solo voluntad política, sino más recursos para paliar la doble insularidad que padecen Menorca y Eivissa, tal como denunció Armengol tras admitir que «la política sin recursos constituye una quimera».
Gobernar significa transformar las promesas en realidades y actuaciones tangibles, lo que implica la creación y aplicación de la tarifa plana de 30 euros para los trayectos interinsulares, así como la construcción de una residencia para los enfermos menorquines y sus familiares junto al hospital Son Espases.