El extraordinario esfuerzo realizado durante el anterior mandato por los ayuntamientos de Menorca y el Consell insular mediante la contención del gasto y las políticas de ajuste, junto con las medidas del Gobierno central, que han impedido nuevos endeudamientos, han reducido la deuda del Consell en un 34 por ciento y de los municipios en un 27,6 por ciento. Gracias a esta gestión austera la deuda municipal de Menorca ha disminuido en estos cuatro años en 18,7 millones y se ha situado en 48,9 millones.
El Consell de Menorca lidera las instituciones insulares que en Balears han reducido la deuda, al pasar de 36,89 millones en 2011 a 24,27 en 2014.
En esta tónica general hay dos excepciones: Ferreries y Es Migjorn, que han registrado incrementos en su carga financiera de 83,4 y 51,1 por ciento respectivamente, motivados por su escaso endeudamiento.
Las administraciones públicas deben proseguir el saneamiento emprendido durante el anterior mandato, lo que implica racionalizar y priorizar las políticas de gasto en servicios y actuaciones de interés general. Los recursos públicos han de ser gestionados siempre con rigor, eficacia y sentido común.