Balears lidera el aumento del precio de la vivienda, que se disparó un doce por ciento durante el primer trimestre, lo que constituye el mayor aumento anual. Comprar una casa en las Islas solo está al alcance de las rentas más altas. Es la región de España donde los precios son más altos, 3,5 puntos por encima de la media nacional, que fue del 8,5 por ciento. Un liderazgo del que no podemos estar orgullosos, ya que bloquea el acceso de futuras generaciones a una vivienda digna.
Entre las causas, que Balears es la comunidad donde más crece la compra de vivienda por extranjeros y que la restricciones urbanísticas inciden en este insoportable encarecimiento. Balears se convierte en una tierra para ricos en un escenario de sueldos bajos e inflación galopante.
¿Qué puede hacer el Govern? Las leyes y el mercado impiden regular directamente los precios, intervenir en los marcos salariales de las empresas o limitar la compra de inmuebles por parte de capitalistas extranjeros. Sin embargo, puede liberar las cargas fiscales y facilitar que haya más suelo a precio asequible. Además de perseverar en las políticas de vivienda social, la eliminación de los impuestos sobre las herencias es, hoy por soy, la medida más eficaz para que las familias no se vean obligadas a vender las casas de sus padres y abuelos, y procurar así un hogar para sus hijos.