El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha renunciado a elaborar los Presupuestos Generales del Estado para este año y empezará a redactar los del 2025. Esta súbita decisión se produce después de que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, haya adelantado las elecciones catalanas para el 12 de mayo, tras fracasar la votación de la cuentas autonómicas de este año en el Parlament. Quedan automáticamente prorrogados los Presupuestos del 2023. No constituye, esta decisión, una buena noticia para Balears porque quedan en el aire reivindicaciones del Govern que preside Marga Prohens relativas, entre otras cuestiones, a la aportación del Estado para los convenios de carreteras y el ferroviario.
El vicepresidente Antoni Costa advierte que con la prórroga presupuestaria peligran el plus de insularidad y las inversiones del Estado en las Islas. «Corta de raíz la agenda balear», denuncia Costa, en referencia a la reforma del sistema de financiación autonómica. Habrá que valorar y cuantificar el impacto que tiene para Balears la renuncia de Pedro Sánchez a redactar los Presupuestos de 2024. Y determinar si afecta también a la aprobación del reglamento para desarrollar y aplicar las medidas contenidas en el Régimen Especial de Balears. Porque el REB, aprobado en febrero de 2019, carece aún de reglamento para ser eficaz.