Los agentes de la propiedad inmobiliaria reclaman a los ayuntamientos de Menorca que agilicen la concesión de las licencias de obra y que permitan el inicio de nuevas viviendas mediante una declaración responsable. Una queja que vienen reiterado los arquitectos, pero que sigue sin obtener ninguna respuesta. ¿Cómo es posible que se tarden hasta dos años para conseguir esta preceptiva autorización municipal que permita construir nueva vivienda plurifamiliar, la más demandada, que ha caído en picado? A ello hay que añadir el endurecimiento de las condiciones de financiación exigidas por los bancos.
Las inversiones no se pueden demorar por la burocracia de las administraciones y los promotores no se arriesgan a firmar contratos al desconocer cuándo podrán edificar y cuándo podrán entregar la vivienda. Todo ello desincentiva la obra nueva plurifamiliar. Los API también denuncian que la falta de alquileres de larga duración en la Isla y la proliferación del alquiler turístico se debe a la inseguridad jurídica a la que están sujetos los propietarios para eludir la desprotección ante los posibles impagos. Es el momento de actuar con eficacia, rapidez y sentido común porque la demanda de vivienda digna y a precio asequible en Menorca es un problema social que exige soluciones inmediatas.