El Ayuntamiento de Ciutadella ha dado este verano un primer paso importante para que la principal plaza de la ciudad, la de Es Born, tenga un uso peatonal y no permita el acceso y aparcamiento de los vehículos. Es normal que haya una cierta oposición por parte de comerciantes, que temen por los efectos sobre sus negocios, como también que al prohibir el aparcamiento haya descendido la presión del tráfico incluso en la Contramurada, la arteria interior. Tras este primer verano sin coches se abre un proceso más largo para desarrollar un proyecto integral, que no habrá concluido cuando finalice este mandato. De todas formas, revertir la peatonalización parece poco probable.
Habrá que apostar por aplicar medidas que respondan a todas las necesidades, sin volver atrás, cuando la idea genérica de un Born peatonal siempre ha contado con un apoyo general. El concurso de ideas contará con la implicación del Colegio de Arquitectos, cuyo presidente, Llorenç Seguí, pone el foco en la necesidad de una propuesta global que defina el ámbito peatonal y la necesidad de un parking subterráneo. La plaza futura debe ser útil, ordenada y no ha de perder nada de su belleza, sino todo lo contrario.