El pleno del Parlament rechazó ayer la toma en consideración de la proposición de ley de Vox que modificaría el actual marco normativo de Balears para declarar al castellano como ‘lengua vehicular’ en la enseñanza, al mismo nivel que el catalán. Vox se quedó solo, con 54 votos en contra y cuatro a favor. También se desmarcaron sus exdiputados Agustín Buades, Idoia Ribas y Xisco Cardona. El día anterior, el Partido Popular registró su propia iniciativa en esta materia que declara la vehicularidad de las dos lenguas oficiales además de incluir la difusión de las modalidades insulares. La propuesta del PP deja en una posición incómoda a Vox al rebajar sus aspiraciones, pero deberá argumentar su rechazo si quiere oponerse.
La portavoz del PP, Marga Durán, ha subrayado que cualquier modificación de las leyes educativas de Balears debe ser fruto del consenso y recordó que pactaron con Vox dos aspectos concretos al inicio de esta legislatura: que ambas lenguas fueran vehiculares en la enseñanza y que se promovieran las modalidades lingüísticas propias. Vox pretendía ir más lejos al recortar la importancia de la lengua propia, el catalán de Balears, anular el decreto de mínimos y limitar la autonomía de los centros educativos, líneas rojas que, como advierte la presidenta Marga Prohens, el PP no comparte ni aprobará.