La decisión de SEBIME de trasladar la feria Eurobijoux & Accessories a Palma va a tener, entre otros, el daño colateral de que nos vamos a quedar sin saber cómo se lo iba a montar el Consell para organizar 24 trayectos de ida y vuelta con grupos de pasajeros relativamente reducidos desde tres importantes ciudades de Europa. El detalle del operativo articulado en 48 horas por el conseller Lázaro Criado no ha trascendido. Según comentarios de personas bien informadas, no era una mala propuesta en cuanto a operatividad aunque adolecía de unos precios quizás demasiado altos. Lo que sacamos en limpio del tema no es poco: el Consell es capaz de organizar un dispositivo aéreo para que la Isla pueda acoger un evento puntual. La duda que nos queda es en qué nivel de urgencia o emergencia se puede volver a activar, es decir, qué tipo de eventos o necesidades son merecedores de que Criado vuelva a levantar el teléfono para poner en movimiento un puñado de aviones en beneficio de los menorquines. Si se puede hacer, vale la pena ser imaginativo y ver cómo se puede aprovechar esta potencialidad. Los lamentos sobre por qué no se ha hecho antes, con Eurobijoux o con lo que sea, ya se suponen. Ahora hay que mirar al futuro. Quizá esté ya más cerca la premonición de Miquel Mariano: "Aerolínies, aerolínies, aerolínies menorquines".
El apunte
Aerolínies Menorquines