El problema más acuciante en materia de ordenación del tráfico en Ciutadella no es si la zona azul ha de ser gratuita o de pago, o si ha de gestionarla el Ayuntamiento o una empresa, a través de una concesión. El acento ha de ponerse en la carencia de aparcamientos que limita la actividad e impide la mejora de la ciudad. Hace años que los ciudadanos están a la espera de una oferta de aparcamientos subterráneos. El primero ha de ser el de la plaza de la Pau, detrás del OAR, después del acuerdo entre el Ayuntamiento y el Obispado, que lo promueve. La tramitación se ha desbloqueado y ahora es necesario que los pasos no se interrumpan. La oferta de plazas de aparcamiento facilitará el desarrollo de uno de los proyectos más ambiciosos, la peatonalización de es Born, una plaza de gran belleza, que sin coches ha de lucir de una forma espectacular.
El aparcamiento soterrado del OAR será insuficiente y habrá que planificar otras acciones. Conviene que los partidos políticos se pongan de acuerdo para que las posibilidades de mejorar las condiciones de movilidad y el atractivo del centro urbano no queden otra vez pendientes por causa de discrepancias políticas. Ciutadella hace demasiados años que espera soluciones.