Nos pasamos otro día

Era sabido que la gente no iba a salir a la calle para celebrar con trompetas y tambores la designación de Menorca como sede mundial de la Red de Reservas de la Biosfera de Islas y Zonas Costeras, como sabido era que casi nadie en esta isla sabía de la existencia de la citada red hasta hace dos telediarios. Aún conociendo la falta de entusiasmo popular por el asunto, es fea la confusión que se ha generado entre Marc, Suárez, Tadeo y Villalonga entorno a la asistencia o no del Consell a la Conferencia Internacional de Dresde donde la buena nueva se debía ratificar. No se entiende que se contara en la anterior legislatura con una Agencia para la Reserva de la Biosfera, con personal propio, que fuera más o menos previsible un intercambio de color político en la institución, que se supiera que la cita de Dresde iba a coincidir con el muy probable traspaso de poderes y que aún así se haya producido la falta de coordinación que han demostrado los emisores y receptores de la información relativa al tema. Es complicado descifrar si esto ha sucedido por la poca pericia de quien estaba o por el poco interés por el asunto del que acaba de llegar, o si ha sido un poco de todo, que es lo más probable. Lo único claro es que no queda demasiado serio ni estético de puertas para fuera que nos hagan sede de algo, aunque sea esto, y les digamos que, si eso, ya nos pasamos otro día.