El Parlament celebra mañana el debate sobre orientación de Política General del Govern, una cita que salvo excepciones concita escasa atención ciudadana debido a las dudas respecto a la trascendencia real que tiene este acto en el devenir de las Islas. Normalmente, se repiten argumentos y batallas partidistas, mientras que muchas de las propuestas aprobadas quedan difuminadas en el tiempo. Además, en esta ocasión se da la circunstancia de que el presidente de la Cámara, Pere Rotger, está imputado en el caso Over y todo parece indicar que ocupará su cargo, ya que de momento no ha mostrado su intención de dimitir. La cita llega, pues, en un momento en el que los juzgados están en plena investigación sobre presuntos casos de corrupción. Todo ello hace presagiar que el 'ruido' generado en torno a las actuaciones judiciales tape el sentido de esta convocatoria, que es el de examinar las necesidades de Balears y buscar las soluciones pertinentes. Por lo que respecta a Menorca, uno de los temas principales que requiere el consenso unánime es una resolución que ayude a poner fin al problema del transporte aéreo. Precisamente, el jueves ha de quedar constituida la ponencia parlamentaria que tratará este tema. Lo que se espera del debate, entre otras cosas, es una acción decidida para acabar con esta situación injusta.
Editorial
Lo que se espera del debate en el Parlament