Sin acceder totalmente a la fórmula propugnada por PIME-Menorca, consistente en el alquiler turístico de cualquier construcción con cédula de habitabilidad, el presidente Santiago Tadeo, dio a conocer ayer la propuesta del Consell para comercializar las estancias turísticas en viviendas.
La iniciativa, que exigirá la modificación de la Ley General Turística de Balears, incluye tres nuevas figuras, hoy no contempladas en este norma, que son las más aplicadas para el alquiler turístico en Menorca. Así, se ampliará a las viviendas unifamiliares entre medianeras; en los complejos de apartamentos bajo una única unidad de explotación, la mayoría, construidos en las décadas de los 80 y los 90; y también en las «cases de lloc» situadas en suelo rústico.
Para no retrasar la entrada en vigor de estas tres fórmulas se prevé la aprobación de una norma específico mientras el Govern establece los criterios para el desarrollo reglamentario. Este hecho, unido a las exigencias de servicio y calidad, revelan que el presidente Tadeo ha pactado los cambios con el Ejecutivo autonómico, con la Federació de la Petita i Mitjana Empresa y con CAEB. Todo un ejercicio de equilibrio y de acuerdo para dar respuesta a esta antigua reivindicación.