Qué buen eslogan, «ellos nunca lo harían». Por más que pasen los años esta frase será heredado por generaciones. Los amantes de los perros lo entenderán el resto quizás no. El perro, el amigo, y compañero fiel. El único que te recibe con amor y alegría. El que te escucha. El que sabe cuándo estrenas y llevas algo diferente que ni tu pareja llega a descubrir. El que sabe cuándo estás triste y se pone a tu lado, o estás embarazada y son ellas las perras las que no te dejan ni a sol ni a sombra. La delicadeza con la que tratan al bebé. Este compañero llega a ser para uno tan importante como como para otros lo pueda ser un rey, un presidente de un estado, un cantante, un escritor de éxito. Este hijo peludo que nunca se independiza pero que adoras por las satisfacciones que te da sin apenas devolverle una cuarta parte.
Los perros nunca te abandonarían, te aceptan como eres, con tus virtudes y manías. ellos nunca te maltratarían. Y son los animales más desprotegidos. No tienen leyes que les amparen, que les protejan como se merecen. El capricho que fue para algunas familias ahora es un estorbo. Una amiga le regaló un perro labrador a su novio porque a él le gustaba mucho, pero a ella solo el momento del regalo porque le parece un rollo eso de sacarlo a pasear y recoger sus pertenencias más indecorosas. ¡Chata, haberlo pensado antes! Mira que hay perros de cerámica que en los 60 se llevaban mucho decorando el hogar con su cadenita de metal abrazándole el cuello. Las personas somos unos inconscientes no miramos el otro lado de la moneda. ¿Qué pasa si abandonamos un perro?, ¿cuál será su vida?. ¿La que un día le hiciste creer que compartía contigo y no será así? Si no tiene la gran suerte de caer en una familia que lo acoja con compromiso y responsabilidad, puede tener un final desagradable, de pasar por varias casas y coger una depresión porque no ha sido querido. Cuando su función es la de ser fiel a su amo y él se adapta a cada uno que pasa sin condiciones, ¡qué persona hace eso!. O cae por desgracia con un maltratador. O peor aun cuando ya no tienen salida, su fin será cruel, electrocutado e incinerado. ¡Por el amor de Dios! el verano no debe ser motivo de abandono de ningún animal; tampoco debe ser motivo de abandono los regalos de perros cuando son cachorros. Yo estoy encantada con mi Lilo, una mezcla potente entre pointer, labrador y dogo.
Negro con sus patitas y cola blanca. Adora a mi hija, y ella a él. Tendría que animarme a hacer un libro de Lilo de todo lo que me aporta y me seguirá aportando. porque de él aprendo cosas que ningún humano me enseñará.
@sernariadna