En Estados Unidos, los ciudadanos de origen judío son solo un 2.4% de la población, una pequeña minoría, sin embargo su influencia en el país es muy grande. Eso se debe a que judíos juegan papeles muy importantes en cultura, artes, ciencias y periodismo. También tienen un papel significativo en los grandes negocios.
Es curioso que los judíos después de cientos de años de la Diáspora mantengan su identidad nacional y su religión. Ademas en todos los países donde han vivido han mantenido un papel importante en la cultura y en el comercio. Otras naciones que han sido dispersadas de sus territorios se han diluido en los países de acogida y han desaparecido como pueblo.
En la política de Estados Unidos tradicionalmente la influencia judía era muy significativa en el partido Demócrata. Por sus posiciones mas bien liberales eran muy odiados por la extrema derecha. Su influencia se reflejaba en su actitud de defensa extrema al estado de Israel. En los años más recientes hubo cambios cuando el Presidente Obama propugnó la existencia de dos estados en Palestina. Una razón más para el odio que muchos ciudadanos tenían a ese presidente que además de progresista era afroamericano y eso no gusta a gran parte de la población americana.
A pesar del odio de la derecha a los judíos por sus ideas liberales, ellos también defendían al estado de Israel por el peso que tiene la Biblia en este sector. La creencia en que Dios había otorgado al pueblo de Israel la tierra de Palestina es fuerte entre los cristianos. El resultado es que debido a la presión de ambos lados la mayoría de americanos han apoyado al estado de Israel. Además lo lobbies pro-Israel son muy fuertes.
Los apoyos al estado de Israel han ido decreciendo en los últimos años. Si miramos los resultado de encuestas hechas por Gallup vemos que en año 2013 los ciudadanos que simpatizaban con al estado de Israel eran el 64% y solo un 12% con los palestinos. Pero estas mismas encuestas muestran que en 2022 los resultados cambiaban a un 54% y un 31%. Cambios que son significativos. Incluso miembros de la comunidad judía dejaron de apoyar al gobierno de Israel. Muchos de los que cambiaron de parecer son votantes del partido Demócrata, mientras que los votantes del partido Republicano se mantuvieron en apoyo a Israel.
También se ven diferencias en el apoyo a Israel con las diferentes generaciones de ciudadanos americanos. Entre los mayores de 65 años un 78% es favorable a Israel, mientras en los de edades entre 18 años y 29 años el porcentaje baja a un 56%. Eso se puede entender ya que personas de mi generación hemos tenido contacto directo con judíos que se escaparon de la persecución nazi y hemos podido empatizar más con su sufrimiento. Para los jóvenes actuales esa persecución es solo una cuestión histórica lejana.
Claramente las posiciones de los ciudadanos americanos con respecto a Israel estaban evolucionando, pero ahora con el impacto de la guerra estos cambios se pueden acelerar. En este momento no hay resultados de encuestas que sean fiables. Cada grupo que las ha organizado saca lo que quieren, habrá que esperar a que entidades independientes hagan encuestas fiables. Ademas con la velocidad a que cambian las cosas en esta guerra, es difícil hacer encuestas que sean útiles.
Una cosa sí es clara, Biden ha perdido apoyos entre los ciudadanos en las pasadas semanas. Su política inicial de apoyo incondicional al gobierno de Israel mientras se llevaban a cabo las matanzas en Gaza fue una vergüenza. Después intentó virar un poquito pero se ha que dado corto. Solo ha pedido ayuda humanitaria para los palestinos, pero poca ayuda se ha podido entregar en Gaza.
El conflicto sigue con un alto número de muertes por parte de los palestinos de Gaza. No hay una seria postura internacional, el gobierno de Israel sigue con sus planes de invasión, y no hay planes de paz. Las muertes continuarán y todo ese conflicto es también una fuente de generación de terroristas. Es desesperante ver la situación en que está el mundo.