El internacional argentino del Barcelona Lionel Messi se ha unido a la campaña mundial de Interpol para sensibilizar al público contra la delincuencia por las consecuencias que las actividades ilegales tienen en la vida de la gente.
Se trata de aprovechar la notoriedad de Messi, el primer futbolista que ha ganado cuatro veces el Balón de Oro para poner de relieve «los peligros del crimen organizado y de otras formas de delincuencia y su impacto en la vida de cada día», indicó hoy Interpol en un comunicado.
La inclusión de la estrella del Barcelona en esta campaña se produce de la mano del secretario argentino de Seguridad, Sergio Berni, con el objetivo de concienciar al público en general, a las empresas y a los gobiernos del papel que tienen para reducir el impacto de la delincuencia.
Su figura se añade a la del actor chino Jackie Chan, que fue desde el comienzo de la campaña, el pasado jueves, su primer embajador.
«A Lionel Messi se le conoce como uno de los grandes jugadores de todos los tiempos y su apoyo a la campaña 'Da la espalda a la delincuencia' muestra su compromiso con el juego limpio tanto en el campo como fuera», subrayó el secretario general de Interpol, Ronald Noble.
A menos de una semana del comienzo del Mundial de Brasil, su respaldo a esta iniciativa -añadió Noble- es «un recordatorio de que apoyes a quien apoyes, todos estamos en el mismo equipo contra la delincuencia».
También dijo esperar que su adhesión a la campaña incitará a otras personas por todo el mundo a unirse para educar y alentar al público a que actúen contra esos comportamientos ilegales.
«Da la espalda a la delincuencia» intenta poner en evidencia que las redes de delincuencia organizada transnacional mueven los hilos del tráfico de drogas, de medicamentos falsos, de productos ilegales, de armas e de incluso personas.
Pero también que otros delitos como la falsificación, la delincuencia informática, los secuestros, el fraude, los crímenes contra menores y la corrupción en el deporte «suelen estar interconectados» con los primeros de forma que unos se utilizan para financiar a los otros.