La princesa Charlène de Mónaco, esposa del príncipe Alberto II, dio este miércoles a luz a dos gemelos, un niño y una niña, que serán los herederos al trono del principado.
La pequeña, Gabriella Thérèse Marie, nació a las 17.04 hora local en el hospital monegasco de Princesse-Grace, dos minutos antes que su hermano Jacques Honoré Rainier, que ocupa el primer puesto en la línea sucesoria, informó este miércoles el Palacio de Mónaco en un comunicado.
«La princesa y los niños están bien», agregó la casa Grimaldi, que precisó que el varón ostentará el título de marqués de Baux, como marca la tradición establecida en 1641, mientras que la niña será segunda en la línea sucesoria y recibirá el título de condesa de Carladès.
La madre conocía el sexo de los bebés, pero el príncipe Alberto II había preferido esperar el parto para descubrirlo, según había confesado el propio soberano.
El principado dio la bienvenida a los gemelos con una salva de 42 cañonazos disparados desde el castillo Fort Antoine, 21 por cada recién nacido.
Las campanas de todas las iglesias de Mónaco repicaron al unísono para después dar el testigo a las sirenas de los barcos atracados en el puerto monegasco.
La noticia del embarazo de la princesa Charlène se conoció el pasado 30 de marzo y poco después la casa Grimaldi confirmó que los príncipes esperaban gemelos.
Se trata de los primeros hijos de la pareja formada por Alberto II, de 56 años, y la exnadadora sudafricana Charlène, de 36, que contrajeron matrimonio en julio de 2011.
El príncipe de Mónaco tiene ya dos hijos reconocidos nacidos antes de su matrimonio y que, por lo tanto, carecen de derechos sucesorios.