Los representantes de España en Eurovisión, Alfred y Amaia, vivieron este sábadosu segundo ensayo en Lisboa, en el que se afinaron detalles en la iluminación y se mostraron emocionados y más cómodos, listos para el arranque oficial del concurso.
Con un vestuario totalmente diferente al del primer ensayo del viernes y cambios en la iluminación y la realización, los españoles volvieron a entonar «Tu canción» sobre el escenario del Altice Arena, de la capital portuguesa, en el que se sintieron más «relajados» que el otro día.
«El otro día faltaban cosas. Hoy cuando hemos visto que estaban bien, nos hemos emocionado», aseguró Alfred en la rueda de prensa posterior, en la que explicó que el viernes estaban «más tensos», pero que hoy han estado «relajados, como si fuese la primera vez».
Los españoles han demostrado su complicidad en el escenario, donde se han probado planos más cortos y se ha cambiado la pirotecnia fallida del primer ensayo por fogonazos de luz en el panel del fondo durante el momento culmen de la canción.
«Hemos tenido unos instantes previos de mirarnos y reírnos un rato, ha sido muy natural», detalló Alfred, a lo que Amaia añadió que siempre que interpretan juntos «Tu canción» es un momento «mágico».
Pese a los cambios, la actuación mantiene el tono sobrio que siempre se le ha dado al tema, que arranca con cada cantante en un extremo del escenario para ir acercándose poco a poco hasta acabar abrazados en el centro, con las cámaras rodeándolos.
Al igual que el viernes, los españoles tuvieron tres pases para ensayar su propuesta, para la que este domingo apostaron por un nuevo vestuario: Amaia lució un vestido negro con trazos plateados y dorados, en vez del mono blanco que llevó el viernes, y Alfred cambió su traje rojo por uno azul.
Sin embargo, el vestuario definitivo todavía no está decidido, según avisaron los cantantes, que señalaron que todavía quedan cosas por matizar con vistas a la gran final del sábado 12, para la que España tiene pase directo.
La complicidad y comodidad de los españoles en el escenario se trasladó a la rueda de prensa posterior, en la que bromearon entre ellos y suscitaron las risas de los presentes en más de una ocasión.
La navarra se animó incluso a entonar una copla a petición de los periodistas, que despertó los aplausos en la sala, aunque al principio se mostró reacia porque prefería reservar la voz.
«Va a tener que cantar Aitana por ti», bromeó Alfred, en referencia a una de sus compañeras en «Operación Triunfo», después de que los periodistas preguntasen si la española tenía problemas en la voz, a lo que ella respondió que está perfectamente.
Los dos tuvieron oportunidad también de comentar cuáles son sus canciones españolas de Eurovisión favoritas, con respuestas muy diferentes: mientras que Amaia optó por el pasado ("Vivo cantando», que Salomé interpretó en 1969, y «En un mundo nuevo», de Karina, en la edición de 1971), Alfred se decantó por una más reciente ("La noche es para mí», de Soraya, en 2009).
A menos de una semana de la gala final, en la que participarán 26 países -20 salidos de las semifinales más los «Big Five» (España, Reino Unido, Francia, Italia y Alemania) y la anfitriona Portugal-, los españoles ya tienen más detalles de cuándo será su turno.
Al final de la rueda de prensa, sacaron una papeleta del bombo que tenía preparado el presentador y que determinó que actuarán en la primera mitad de la gala, lo que no agradó a Amaia, que exclamó un apesadumbrado «¡Jo!» al desdoblar el papel.
Los españoles continúan la jornada de este domingo con la «alfombra azul» que se colocará en el Museo de Arte, Arquitectura y Tecnología (MAAT), a orillas del Tajo, y por la que desfilarán las delegaciones de los 43 países participantes.
En el evento, que supone el arranque oficial del concurso antes de las semifinales del martes y el jueves, Alfred y Amaia desfilarán en la posición número 37, ya que los países salen en orden alfabético a excepción de la anfitriona Portugal, que cerrará la alfombra.