Manu Pascual ya es una leyenda del concurso televisivo ‘Pasapalabra’. Lleva jugando más de 100 programas consecutivos, sin embargo, la semana pasada una de las letras de la última prueba, el rosco final, se le atragantó al joven madrileño.
«Con la S, municipio de Baleares situado en la isla de Mallorca en el que se encuentra el museo modernista Can Prunera», le interpelaba el presentador, Roberto Leal. «Paso palabra», contestaba Manu; que no daba con la respuesta: Sóller.
El concursante consiguió resolver el resto de palabras, una por cada letra del abecedario; pero falló la letra ‘Y’ y no supo responder a la ‘S’, por falta de tiempo. Así, Manu perdió la oportunidad de ganar el bote del conocido concurso, que en esos momentos alcanzaba 1.036.000 euros.
La más bella
Can Prunera se construyó entre 1909 y 1911 por encargo del empresario Joan Magraner. Décadas después la familia vendió la propiedad al Ferrocarril de Sóller que, a través de la Fundació Tren de l’Art, inauguró en 2009 el museo de arte con una colección mayoritariamente contemporánea.
Desde entonces, este imponente casal acoge obras de artistas como Joan Miró, Picasso o Santiago Calatrava.
Un museo que no conoce nadie si no eres de Soller