El verano invita a pasar más tiempo en la piscina, disfrutando del sol y el agua fresca. Sin embargo, este placer veraniego puede tener efectos adversos en la salud de tus uñas. El cloro, utilizado como desinfectante en las piscinas, tiene varias consecuencias negativas que pueden debilitar y dañar tus uñas. A continuación, explicamos cómo ocurre esto y qué medidas puedes tomar para protegerlas.
Efectos del cloro en las uñas
El cloro presente en el agua de las piscinas puede causar estragos en la estructura de tus uñas. Este químico, aunque esencial para mantener las piscinas libres de bacterias y otros patógenos, es extremadamente deshidratante. Las uñas, compuestas en gran parte por queratina, absorben el agua, y cuando esta contiene cloro, el resultado es la eliminación de los aceites naturales que mantienen las uñas hidratadas y saludables.
La exposición constante al cloro puede hacer que las uñas se vuelvan frágiles y quebradizas. Este daño se produce porque el cloro no solo deshidrata la placa ungueal, sino que también afecta la cutícula, lo que puede llevar a infecciones y otros problemas relacionados con el crecimiento de las uñas.
Debilitamiento y rotura
Las uñas son porosas y absorben el agua con facilidad. Cuando están expuestas al cloro, estas absorben el químico, lo que provoca que se expandan y contraigan repetidamente. Este ciclo de expansión y contracción debilita los enlaces en la estructura de la uña, haciendo que se vuelvan más propensas a la rotura.
Además, el cloro puede causar una decoloración en las uñas, especialmente si se usan esmaltes de tonos claros, resultando en manchas amarillentas o un aspecto apagado y sin vida. Los esmaltes semipermanentes no son una barrera efectiva contra el cloro, ya que también son porosos y permiten la penetración del agua y el cloro.
Cómo proteger tus uñas
Para minimizar el daño que el cloro puede causar a tus uñas, es esencial seguir algunos consejos de cuidado:
- Hidratación: Usa cremas hidratantes que contengan aceites naturales como el de argán o el de coco para mantener las uñas y cutículas hidratadas.
- Esmaltes protectores: Aplica una base de uñas con extractos naturales y un top coat para crear una barrera contra el cloro.
- Alimentación adecuada: Consumir una dieta rica en vitaminas A, B, C y D puede fortalecer las uñas desde el interior.
- Ducha posterior: Enjuaga bien tus manos y uñas con agua fresca después de salir de la piscina para eliminar cualquier residuo de cloro.