La jubilación, antes un proceso confuso para muchos españoles, se ha convertido en una consulta rápida y accesible gracias a las recientes mejoras digitales puestas en marcha en 2025. La llegada del Real Decreto-ley 11/2024 ha supuesto un cambio radical en cómo los ciudadanos pueden anticipar y gestionar su pensión, gracias a una oferta de servicios electrónicos que agilizan un cálculo que tradicionalmente era complejo y tedioso.
España ha dado un paso adelante en la transparencia de las pensiones públicas, haciendo que la información, antes reservada a expertos y gestores, esté ahora al alcance de cualquier trabajador desde el móvil o el ordenador. Esta modernización nace de una estrategia iniciada en 2015 y renovada entre 2024 y 2025 para democratizar el acceso a la información que sostiene el sistema contributivo: las bases de cotización, los coeficientes que regulan anticipos o demoras, y los límites que fija la ley.
El avance es especialmente palpable en dos plataformas oficiales que comparten datos y ofrecen servicios complementarios. Estos portales nacen con la misión de facilitar una información fiable, detallada y adaptada al usuario, evitando confusiones y favoreciendo una planificación más acertada.
Herramientas oficiales para simular la pensión
En primer lugar, Tu Seguridad Social es el simulador clásico integrado en la sede electrónica del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Esta herramienta permite consultar, de forma actualizada y en tiempo real, todo el historial laboral registrado, mostrando la fecha prevista de jubilación y el cálculo estimado de la pensión si el usuario se jubilase en ese instante. Además, ofrece la posibilidad de proyectar escenarios alternativos, adelantando o demorando la fecha de retiro para observar el impacto económico.
El acceso a esta plataforma se realiza de forma segura mediante sistemas Cl@ve, certificado digital, DNI electrónico o incluso con un SMS enviado a un teléfono móvil registrado, lo que facilita la autenticación por diferentes perfiles de usuarios.
Desde marzo de 2025, España cuenta también con Import@ss, un simulador que destaca por su rapidez, proporcionando estimaciones en apenas dos minutos. Su principal innovación es la integración del método mixto de cálculo que estará plenamente vigente a partir de 2026. Esta fórmula permite al usuario comparar al instante las dos formas oficiales de computar la base reguladora y escoger la más favorable, adelantando lo que será la práctica estándar para la Seguridad Social en los próximos años.
Ambas plataformas utilizan un único sistema de datos, por lo que cualquier actualización o modificación que realice el usuario —como incorporar periodos de desempleo o augurar una subida salarial— se refleja simultáneamente, facilitando una experiencia unificada y coherente.
Del cálculo a la pensión final
El cálculo de la pensión pública en España se basa en una serie de pasos muy precisos. Primero, se determina la base reguladora, que equivale a la suma de las bases de cotización de los últimos 25 años, es decir, los 300 meses previos, dividida entre 350 para ajustar el efecto de las pagas extras.
A partir de 2026, los trabajadores tendrán la opción de calcular esta base reguladora mediante el método mixto, que toma las 302 mejores bases cotizadas durante los 304 meses previos, dividiéndolas entre 352,33. Este cambio beneficiará a quienes hayan tenido periodos con cotizaciones más altas, mejorando el monto final.
Tras establecer esa base, se aplica un tanto por ciento progresivo sobre ella: comienza en el 50% con 15 años cotizados y escala hasta el 100%, que en 2025 se alcanzará teniendo en cuenta la edad y los años cotizados. Por ejemplo, para acceder al 100% de la base reguladora, los ciudadanos que se jubilen a los 65 años necesitan haber cotizado 36 años y 6 meses. Si la jubilación ocurre a la edad legal ordinaria de 66 años y 8 meses, el tope es de 38 años y 3 meses.
Además, los simuladores incluyen de forma automática los coeficientes reductores y bonificaciones. Los primeros aplican penalizaciones de hasta el 21% a quienes adelanten la jubilación, mientras que las segundas conceden incrementos del 4% por año trabajado más allá de la edad legal, acumulándose y premiando así a quienes extienden su vida laboral.
Finalmente, el importe máximo que puede recibir un pensionista en 2025 está regulado: la pensión máxima es de 3.267,60 euros al mes, y la pensión mínima contributiva para quienes viven solos se sitúa en 874,40 euros mensuales, cifras actualizadas tras la revalorización del 2,8% correspondiente a este año.