En España, la educación financiera continúa siendo un gran desafío para las nuevas generaciones. Más allá de impartir conocimientos básicos, muchos expertos advierten que existe una condición social que genera incomodidad al hablar sobre el dinero. Esta es una de las principales críticas que recientemente ha destacado el empresario multimillonario José Elías, haciendo hincapié en la forma en la que desde la infancia se aborda este tema en colegios y hogares.
Desde un enfoque directo y sin eufemismos, denuncia que en el sistema educativo no se preparan a los jóvenes para comprender el valor real del dinero ni para administrar sus finanzas personales. Más aún, sostiene que hay un condicionante que promueve la idea de que hablar de dinero es tabú, o incluso inmoral, lo que dificulta que los alumnos internalicen conceptos básicos y elementales sobre economía.
Según esta perspectiva, lejos de informar y formar, el actual modelo escolar se orienta a crear sentimientos negativos en relación con el dinero, una situación que repercute directamente en la manera en cómo los jóvenes enfrentarán sus finanzas en la vida adulta, un aspecto que debería ser prioritario para cualquier país.
Influencia cultural y social en la percepción del dinero
El empresario señala que en España existe una mentalidad dominante que rechaza el diálogo abierto sobre dinero. Se suele transmitir la creencia de que el dinero es algo negativo, inmoral o que hablar de ello es de mal gusto. Esta idea suele reforzarse desde la infancia, incluso en las aulas, generando en los jóvenes una relación ambivalente y a menudo dañina.
La frase 'lo importante es vivir la vida' es utilizada con frecuencia para justificar la falta de educación financiera, pero resulta vacía si no se acompaña de información sobre cómo manejar recursos económicos para garantizar una vida estable y satisfactoria. Esta ambigüedad entre el mensaje y las acciones concretas crea confusión y dificulta la responsabilidad financiera en las sucesivas etapas de la vida.
Curiosamente, el empresario explica que desde pequeño ya tenía un interés marcado por conseguir independencia económica, dedicando tiempo a actividades manuales que generaban ingresos. En contraste, muchos jóvenes que terminan sus estudios no son conscientes ni están preparados para afrontar los retos económicos que se les presentan en su etapa adulta.
La educación financiera en el sistema educativo español
El sistema educativo español, a día de hoy, apenas incorpora contenidos sobre finanzas prácticas o economía básica en los planes de estudio oficiales, según Elías. Los jóvenes terminan sus estudios con un conocimiento muy limitado sobre temas como ahorro, inversión, préstamos o planificación financiera, aspectos esenciales para desenvolverse en la vida adulta.
Además, existe un fuerte componente cultural que desaprueba el debate abierto sobre dinero. En España, hablar de ingresos, gastos o inversiones puede verse como un signo de falta de discreción o incluso de mal gusto, lo que dificulta que se generen hábitos saludables desde pequeños. Este enfoque genera un círculo vicioso: sin educación ni diálogo, la falta de comprensión financiera se perpetúa.